Inodoro con fluxómetro

Un inodoro con fluxómetro tiene un mecanismo con el que poder descargar agua utilizando una red de agua con elevada presión para que la descarga sea abundante y muy corta.

Para qué sirve un inodoro fluxómetro

Si has decidido renovar tus baños, te habrás encontrado con la opción de instalar un fluxor para inodoro. Los fluxómetros para wc son un mecanismo de descarga de alta presión. Son mucho más potentes que los sistemas tradicionales de cisterna, que son los que estarás más acostumbrado a ver.

Se trata de un sistema estupendo de cañería, ya que, si lo instalas de la forma adecuada, no tendrás que preocuparte más por el sistema. De hecho, puedes utilizarlo en toda clase de inodoros y desagües, mejorando el funcionamiento del baño y siendo mucho más duradero que los comunes. Además, se trata de una solución perfecta para reducir el consumo de agua.

Cómo funciona el fluxor para inodoro

El fluxor está compuesto por dos cámaras que se separan por un diafragma, una válvula y un mecanismo de palancas. Los sistemas de cisterna tradicionales están basados en la gravedad para vaciar el contenido. Sin embargo, en este caso es la presión del agua lo que explica cómo funciona fluxor de inodoro. Una vez es activado, el agua que esta en las dos cámaras, fluye hacia el exterior y sale por la válvula de alivio. El fluxor mide el flujo de agua, de forma que cuando ha fluido la cantidad suficiente, las cámaras vuelven a llenarse hasta que se igualan a la red.

Eficiencia en la descarga

El sanitario con fluxometro hace uso de la presión para hacer la descarga, de forma que es mucho más eficiente. Para empezar, mientras que en las cisternas convencionales tienes que esperar hasta que la cisterna vuelva a llenarse, en este siempre esta disponible y no hay tiempos de espera. Esto, además, posibilita realizar descargas sucesivas, por lo que es perfecto sobre todo para baños que vayan a tener bastante tránsito.

Medidas de higiene

La higiene es otra de las grandes ventajas de este sistema. Olvídate de que se estanque el agua o de que haya impurezas en las misma. Todo esto contribuye a que aparezcan, crezcan y se desarrollen más bacterias. Sin embargo, en los sistemas de fluxor esto no ocurre.

Ahorro en agua

Además, el control del agua utilizada es exacta. La presión esta pre-regulada, por lo que está muy limitado y controlado el nivel de agua que fluye y se utiliza cada vez. De esta forma, si lo instalas, comprobaras que las facturas de agua serán mucho más bajas. Por lo tanto, a largo plazo, es una inversión muy rentable.

Alta durabilidad

También se trata de un mecanismo muy resistente. No solamente están preparados para un uso intensivo, sino que además están fabricados con componentes que son robustos y de calidad. De esta forma, puede aguantar en perfectas condiciones mucho tiempo e incluso resistir actos vandálicos.

Fácil mantenimiento

Por si fuera poco, se trata de un mecanismo con un mantenimiento muy simple. El cartucho tiene su propio sistema de limpieza y filtros incorporados. De puede desmontar sin necesidad de abrir la válvula. De esta forma, podrás realizar labores de mantenimiento tu mismo y sin necesidad de profesionales para su cuidado.

Comodidad

El fluxor empotrado ocupa mucho menos espacio que las cisternas. De esta forma, puedes pegar el WC a la pared y conseguir más espacio en tu baño. Tampoco hace ruidos ni necesita tiempo para volver a ser utilizado, por lo que es mucho más cómodo para el uso cotidiano. Tampoco produce humedad en el ambiente.